lunes, 19 de mayo de 2008

Oiarzábal

Yo amo los mundos sutiles ingrávidos y gentiles como pompas de jabón. Cimas.
Érase una vez un hombre que decidió ponerse metas muy altas. y marchó presto al Himalaya y ascendió varias veces a las mayores cumbres, nadie nunca subió tantas como él ¡Estuvo tan cerca del cielo! En sus contiendas con la altura encontró otros duros enemigos: el frio hielo aliado a un viento de cuchillos, la gran mole blanca, el vacio primigenio, la soledad más sonora y ululante... En las largas refriegas de tan desigual batalla perdió amigos arrebatados por la montaña, perdió todos los dedos de sus pies. Empeñó sus ilusiones. A veces estuvo a punto de perder hasta la esperanza. Pero logró sentirse realizado y contemplar el pequeño rostro de Shangita, su hija adoptiva nacida en Nepal.

Y desde entonces, todas las cimas se inclinan a su paso.

15 comentarios:

Sara dijo...

desde luego!!como para no inclinarse todas las cimas a su paso...conseguida esa cumbre...la de la ilusión, la esperanza, todo lo demás es fácil de superar.
Preciosa tu historia ¡como siempre cargada de tintes sabios y con miga, con mucha miga para alimentar a Shangita.
un abrazo

Ginebra dijo...

¡Qué bonito!. Estoy de acuerdo con el comentario anterior... ¿cómo no iban a sucumbir las cimas?. Si el hombre pone empeño puede conseguir cualquier cosa. La tenacidad hacia una meta positiva, ¡maravillosa evolución humana!. ¿por qué nos empeñamos en lo contrario?.
Feliz noche, Queiles.

Camille Stein dijo...

qué preciosidad

hay cumbres realmente insuperables

y viajes definitivos



una completa belleza

un saludo

siempre el mar dijo...

Queiles, como siempre, no me dejas indiferente.
Me quedo con la reflexión después de leerte.
besitos.

Rolando Escaró dijo...

hay desafios que transforman por completo nuestra existencia

Maritza dijo...

Todo lo que podemos hacer para alcanzar un objetivo.

Un abrazo Queiles

TORO SALVAJE dijo...

Bien por él.

Y por su hija.

Saludos.

Anónimo dijo...

Bravo, con ese premio no hay cima que se resista.

Besos

Kate dijo...

Qué bonito Queiles! Como dijo el poeta, "si vas a emprender el viaje hacia Ítaca, pide que tu camino sea largo..."... Me gustan las personas a las que el miedo no detiene... yo también me inclino a su paso... Un saludo!

Pequeña Ainhoa dijo...

Que bonito Queiles, quizás todos te digamos lo mismo pero es que la verdad.
Gracias por escribir asi.
Un beso hasta el cielo y gracias por ser como eres y estar ahi siempre.
Loly, la mamá de Ainhoa

angela dijo...

Ese afán de superación hace a los hombres distintos, los hace grandes, y a veces como es el caso inmortales porque sus gestas siempre se recordarán.Un saludo.Angela

Abriles dijo...

Disculpa la tardanza, querido amigo queiLes.
TE QUEDÓ ENVIDIABLE LA HISTORIA.
un abrazo desde mi otoño

Queiles dijo...

Os tengo que dar las gracias a todos por que me animais mucho a escribir.

Pero en este post a quien más hay que agradecerle es a Juanito Oiarzábal, el hombre que mas ochomiles ha escalado de todo el mundo, en concreto 22.

me gusta que vengas por aquí , Sara y tambien Ginebra, siempre el mar, digler, maritza, torosalvaje, Lúcida, kate,pequeña ainhoa,angela y abril.Todos me agradais cada uno en su singularidad .Besos agradecidos a todos y tambien hasta el cielo.

Carola. dijo...

Precioso homenaje. ¡Va por él!
Besos.

Abriles dijo...

es impresionante como no se me olvidan algunas cosas. Cuando todavia era tu cómplice me enviaste a este post para que lo leyera antes de que lo publicaras, recuerdo que le hiciste varias modificaciones... recuerdo, recuerdo, recuerdo, recuerdo, recuerdo maldita memoria