jueves, 11 de diciembre de 2008

Echar raíces.

Plantado en el cielo.

Vi un árbol plantado en el cielo como corazón que germina en novedosa primavera. Sus raíces retadoras miraban al universo. Sacando todo alimento de los pájaros, de las nubes y del viento. Árbol de ramas que abrazan la tierra. Sus hojas nuevo vestigio, antigua primicia. Un árbol como pocos; dispuesto a volcar la anquilosada estabilidad de los tópicos, la ostentosa mesa de quien asegura que otro mundo no es posible. Árbol plantado en el aire .Brisa fresca en el presente. Savia de futuro en sus tallos. Madurez de esperanza en sus frutos. Árbol creciendo en el infinito, donde no hay obstáculo para sus raíces y todo es posibilidad, donde echar raíces solo es amanecer cada mañana caminando.
Me dirán que está muerto pero que signo de libertad en su entrega.

19 comentarios:

XuanRata dijo...

Hace un par de entradas te preguntabas por el lugar de las certezas mirando también las ramas de un árbol contra el cielo. Ya entonces tenías la respuesta sin saberlo.

PABLO JESUS GAMEZ RODRIGUEZ dijo...

"...dispuesto a volcar la anquilosada estabilidad de los tópicos, la ostentosa mesa de quien asegura que otro mundo no es posible..."

Muy bonito, como siempre, Queiles. Me encanta la ESPERANZA.

Yo pienso que otro mundo SI es posible.

Un abrazo!

Anónimo dijo...

Todo un post lleno de esperanza.
Muy bonito.

en las nubes dijo...

Estoy con Lúcida, todo esperanza... precioso echar raices si eso te permite seguir creciendo...
besos!

Ginebra dijo...

Precioso Queiles, tu blog cada día me gusta más, la verdad. Ese árbol con la raíz hacia el infinito llegará a tocar el "cielo". Me alegro de haberte conocido, amigo. Besos

Jeanne dijo...

Si hubiera nacido árbol en lugar de sirena sin duda querría tener mis raices plantadas en el cielo.

Me encanta la idea, es como un sueño hecho realidad. Raices que crecen hasta el infinito...que más se puede pedir.

:-)

இலை Bohemia இலை dijo...

que libre manera de echar raíces...
leyéndote se me llenó los pulomones de aire nuevo...

Abrazos

Susana Peiró dijo...

Y qué dignidad Queiles!

Gran construcción de imagen y pensamientos. Gran Mensaje!

Muchas Gracias!

La sonrisa de Hiperion dijo...

"Vi un árbol plantado en el cielo como corazón que germina en novedosa primavera. "


Y no me extrañaría que hubieras visto una bandada de pájaros tirándole a las escopetas....
Saludos!

siempre el mar dijo...

La vida al revés jaja, me ha gustado mucho la foto y de tus palabras que decirte....siempre me hacen pensar.
Un beso amigo Queiles

Sibyla dijo...

Hola Unicornio!

No me preguntes cómo vine hasta aquí, pero llegué para disfrutar con la imagen y el texto.

Un placer descubrirte!

Salud2:)

Catalina Zentner Levin dijo...

Vuelvo. Queiles, para decirte gracias y dejarte un saludo lleno de afecto en este final de año que se aproxima.

¿Me quedará acaso alguna raíz de la que broten ilusiones?

Oteaba Auer dijo...

me encataría ser ese árbol plantado en el cielo.
Precioso texto Queilles
besos

Maritza dijo...

Eso es lo que se llama crecer después de una caida, excelente
Un abrazo

Soy ficción dijo...

Si, y es que para los ángeles las ramas de los árboles deben ser raíces que se estiran hacia las nubes para beber.

Condevolney dijo...

Preciosa imagen literaria, desde la primavera, de anteras, pistilo y abeja, por las retadoras raíces voladoras, hasta el árbol infinito signo de libertad.

Desde mi alma farolera, recibo vida del unicornio azul, soy lento, pero seguro que volveré.

Anónimo dijo...

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